jueves

Time goes by

Estoy aquí sentada, en el patio interior de mis sueños, un rayo de sol se clava en mis párpados cerrados, calentando las pupilas, una guitarra suena mientras miro las nubes corretear por el cielo y los átomos del aire huelen a chocolate con leche. Toni aun no ha llegado pero yo creo en mí, y sé que vendrá, por eso estoy tan contenta esta mañana. Pasan los minutos, emigran los pájaros, lloran las horas y se marchitan las rosas… es de noche y ya está aquí.
Hoy está más guapo que nunca, y lo sabe, pero algo quema en él, parece triste, y es que creo que viene a despedirse.

_ ¿Por qué vas a decirme que ya no me quieres?, ¿Y lo vas a hacer de este modo? ¿Tan a propósito?, ¿Llevando este perfume que tanto me gusta? Ayer me querías Toni, no puedes dejar de quererme de la noche a la mañana.
_Lo que no puedes hacer tu, Elena, es ver que me voy cada vez que llego. Ese es tu problema, que incluso soñando te da miedo que se acerquen a decirte que te quieren. Y esa era mi intención, iba a decirte a propósito, que te he echado de menos todo el día.

1 comentario:

Anónimo dijo...

És preciós, dur però preciós. Ja saps que sóc la teva admiradora número 1, que m'encanta com escrius. I gràcies per tornar-ho a fer, que tenies això ben abandonat.


petons!